¿Qué son los radicales libres? ¿Cómo funcionan? ¿Por qué son tan importantes? Para entenderlo os dejamos la siguiente la explicación.



Las células normales tienen un par de electrones, lo que les confiere estabilidad. Los radicales libres son moléculas muy reactivas que roban un electrón a la célula y la convierten en un radical libre. En este momento entran en juego los antioxidantes, son moléculas capaces de neutralizar esta falta (cediendo un electrón a la célula) y estabilizar a las células.

Por lo tanto, si hay una carencia de antioxidantes comenzará el proceso de oxidación, envejecimiento celular. Los radicales libres se forman de manera natural en nuestro organismo, como resultado de diferentes reacciones biológicas de las células.

Pueden producirse por factores endógenos o exógenos.
- Endógenos: estrés, mala alimentación, deshidratación, exceso de ejercicio físico…
- Exógenos: radiación solar, contaminación atmosférica, tabaco, alcohol…





¿Cómo evitar los radicales libres?

Nos ha quedado claro que los antioxidantes son la clave, ya que son moléculas capaces de prevenir o retardar la oxidación producida por los radicales libres.

Como ya hablamos en un blog anterior, los antioxidantes están presentes en muchos alimentos. También los conocemos como vitaminas y minerales.

- Polifenoles: fresas, granada, tomate…
- Vitamina C: kiwi, naranja, pimientos…
- Vitamina E: espárragos, espinacas, brócoli, aguacate…
- Betacarotenos; zanahoria, tomate, mango, melón…

¿Cómo hacemos para recargar nuestro cuerpo de antioxidantes?

Con una dieta variada, enriquecida con alimentos de temporada, combinada con una correcta hidratación y una rutina de ejercicio físico. Recuerda, los antioxidantes son un estupendo remedio ansiedad.